La ciudad de la prehistoria
Si tuviéramos que hacer un ranking de los poblados más importantes de la prehistoria de Menorca, Torre d’en Galmés estaría, sin duda, en el puesto número uno. La cantidad de elementos de la época talayótica, los restos encontrados y la luz que ha arrojado de los primeros pobladores de la isla, lo convierten en una visita obligada para cualquier amante de Menorca. La importancia de Torre d’en Galmés para comprender cómo era la vida en el pasado, sitúan al poblado como uno de los enclaves talayóticos más importantes de Baleares. Teniendo en cuenta que este 2022, Menorca puede ser declarada patrimonio mundial por la UNESCO por la candidatura de Menorca talayótica, ¿le echamos un vistazo a Torre d’en Galmés?
Más de 65.000 metros cuadrados de poblado
Cuando decimos que Torre d’en Galmés es el poblado prehistórico más importante de Menorca, es porque tenemos más de una razón para afirmarlo. La primera, la extensión. 66.240 metros cuadrados, aproximadamente unos 5 campos de fútbol, en los que todavía se observan claramente edificaciones que tienen miles de años. La segunda, es la cantidad de materiales y evidencias que las excavaciones arqueológicas han recuperado sobre los primeros pobladores de la isla, al inicio de la Edad de Bronce, hace unos 3.500 años. Torre d’en Galmés, que está ubicado sobre un cerro con una vista espectacular de la costa sur, no dejó de utilizarse hasta la época romana, aunque se abandonó definitivamente en el siglo XIII, con la conquista cristiana. Otra razón para asegurar que fue un lugar importante en la sociedad prehistórica, especialmente durante la época talayótica, es la evidencia del número de personas que pudieron llegar a convivir en el espacio: hasta unas 900, según los cálculos de algunos historiadores.
Qué vas a ver en Torre d’en Galmés
Durante el recorrido del poblado, que se puede realizar a pie, verás distintas construcciones. Las más grandes y vistosas son los tres talayots, pero las más numerosas son las casas de planta circular de la misma época. También son visibles la sala hipóstila, varios sistemas de recogida de agua y cuatro hipogeos, que tenían una función funeraria. También se sostiene en pie el recinto de taula, aunque una de las construcciones más bonitas y mejor conservadas es la que los arqueólogos han bautizado como el Círculo de Cartailhac. Este círculo es, en realidad, una casa de época talayótica, y una muy bien conservada, donde se distinguen los distintos espacios característicos de estas construcciones. Un patio delantero, la puerta de entrada, el patio central de la casa, las distintas habitaciones y el hogar de fuego. ¿Te imaginas entrar en una casa de hace 1.800 años?
La visita
Podríamos explicarte mucho más sobre Torre d’en Galmés, pero lo mejor es que planifiques una visita al yacimiento. Una mañana de paseo entre piedras e historias que podrás complementar con la visita al centro de interpretación que está ubicado justo a la entrada del poblado.
Para llegar a Torre d’en Galmés desde Alaior, debes coger la carretera que lleva a Son Bou, y desviarte en el punto 2,2 de esa misma carretera por un camino rural. A 1,3 kilómetros de esta entrada, encontrarás señalizado el aparcamiento del poblado. El horario de visita es de mañanas, de martes a domingo desde las 9 hasta las 15:30, y la entrada para adultos cuesta 3€ y es gratuita para los menores de 8 años. El centro de interpretación abre también de lunes a viernes, de 9:15 a 15h, y los fines de semana en horario de 9:15 a 16:15.