Julio González


Barcelona, (1876) - Paris, (1942)

Escultor y pintor español

Julio Luis Jesús González-Pellicer, más conocido como Julio González, nace en Barcelona en el seno de una familia de orfebres catalanes, donde aprendió forja en el taller familiar González e Hijos en plena efervescencia modernista, pese a que su voluntad era ser pintor. Cursó estudios en la Escuela de Bellas Artes de Barcelona.

En 1900, tras el cierre del taller familiar, se traslada junto con su hermano Joan a París donde transcurrirá gran parte de su vida. Es allí donde coincide y entabla amistad con Pablo Ruiz Picasso, Juan Gris y Pablo Gallego. Al poco de estar en París fallece su hermano, con el que estaba muy unido, lo que le produce una gran depresión, haciendo aún más patente su ya de por sí naturaleza introvertida, limitando su producción artística así como su círculo de amistades.

Aunque es la pintura la que lo atrajo en sus comienzos, fueron sus conocimientos del metal y la forja, adquiridos durante su infancia y adolescencia en el taller familiar, lo que le llevaron a iniciarse en la escultura.

Sus primeros trabajos están basados en dos diferentes temáticas, las naturalezas muertas y las máscaras. En las naturalezas muertas se pueden observar ciertas influencias del cubismo, mientras que en las máscaras es el arte africano su base de inspiración.

En el periodo de la Primera Guerra Mundial encontró trabajo en la fábrica de automóviles Renault, en la división de soldadura autógena, y esta experiencia le resultó muy útil para refinar aún más su técnica.

Realiza su primera exposición individual en 1922 y es a partir de 1927 cuando centra su actividad artística en la escultura aprovechando sus conocimientos del hierro, la forja, la orfebrería y la técnica de la soldadura autógena.

1929 es el año en el que Julio González rompe definitivamente con la influencia cubista para sumergirse en la técnica de la abstracción.

Es en la década de los treinta cuando nos ofrece su mayor y mejor producción, en sus intentos de unir materia y espacio, lo que le vale para ser considerado como un auténtico revolucionario de la escultura contemporánea y uno de los mejores escultores de la primera mitad del siglo XX.

A través del ensamblaje y la fundición de elementos lineales es como consigue el movimiento en sus obras y crea un nuevo lenguaje escultórico donde prima la abstracción.

Convertir el hierro en un material artístico es quizás la principal aportación de Julio González a la escultura, junto a sus formas del todo innovadoras.

Su obra está expuesta en diferentes museos como el Museu Nacional d’Art de Catalunya (Barcelona), el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (Madrid), el IVAM de Valencia, el Centro Georges Pompidou de París, etc.

Fallece el 27 de marzo de 1942 de un ataque al corazón en su casa de Arcueil.

Obres Exposades

  • "Autorretrato", dibuix damunt paper, 1941.